EL CASO DE NARYELI CACHARUCO


El tema de hoy es la historia de una joven de solo 15 años con numerosas controversias y misterios sobre cómo ocurrió, de manera que muchos creen que hubo intervención de entidades sobrenaturales. Hoy hablaremos sobre el caso de NARYELI CACHARUCO, la chica poseída. Antes de comenzar con el tema de hoy, es interesante mencionar que será necesario mencionar algunas religiones y describir brevemente algunas prácticas. También debemos señalar que gran parte de lo que se cuenta en esta historia se basa en afirmaciones de familiares de la víctima y sus opiniones sobre lo que creen que sucedió, incluso si va en contra de la opinión de médicos expertos que atribuyen el caso a causas científicas. Sin embargo, para la familia, la historia involucra entidades y rituales.


Este tema fue solicitado en los comentarios, y es una historia delicada solicitada por los espectadores. Pero como siempre, el objetivo aquí es contar la historia sin la intención de impactar a los espectadores ni opinar sobre lo que sucedió, lo que nos da el derecho de omitir detalles innecesarios para comprender la historia.


NARYELI CACHARUCO era hija de André Guillen y José Gomes. Algunas fuentes varían su edad entre 15 o 16 años, pero lamentablemente, a pesar de una investigación profunda, no fue posible encontrar la fecha de nacimiento correcta. Por lo tanto, tomaremos en cuenta la fecha mencionada en sitios de publicación oficial de periódicos, que la sitúan en 16 años. Ella nació en La Guaira, ubicada en el estado de Vargas, Venezuela. Según el último censo de 2001, la ciudad tenía aproximadamente 19 mil habitantes.


Los padres de NARYELI estaban separados, pero aún así se esforzaron mucho por darle lo mejor a su hija, quien fue diagnosticada con asma desde que era niña. Ademas padecía de una condición que afecta el flujo sanguíneo que va del corazón al cerebro, disminuyendo drásticamente y causando desmayos, especialmente en momentos de fuertes emociones. NARYELI tenía una infancia común, siendo criada en un hogar católico y era devota de María, al igual que su madre. Se describía como una chica alegre y dinámica que practicaba "cake pop," un deporte que es una mezcla de fútbol y béisbol.


Vivía con su familia en el barrio de Santelmo, pero se mudaron a un barrio cercano, a unos 30 kilometros de distancia, en San Julián . Fue en este nuevo barrio, a principios de 2019, donde hizo amistad con una chica llamada Stephany Karolyne Rodríguez Jiménez , quien también había mudado recientemente al vecindario, viviendo a cinco casas de distancia. En ese momento, NARYELI tenía 16 años y Stephanie 19. Desarrollaron una fuerte amistad casi de inmediato y pasaban la mayor parte de su tiempo libre juntas, yendo de compras, al cine y a fiestas.


Sin embargo, algo preocupaba mucho a la madre de NARYELI: Stephanie estaba involucrada en la santería. En términos simples, la santería es una religión que, entre otras influencias, tiene vínculos con culturas indígenas y que implica la adoración de entidades, el trance y la adivinación para comunicarse con ancestros y divinidades. Es importante recordar que este es solo un resumen breve para comprender los hechos de esta historia; la realidad es mucho más compleja que esto.


En algunas ocasiones, Stephanie supuestamente habría invitado a NARYELI a acompañarla en las adoraciones y rituales de su religión, así como en algunas sesiones espirituales. Sin embargo, NARYELI nunca aceptó debido a su devoción católica. A pesar de esta diferencia religiosa, las chicas nunca dejaron que esto afectara su amistad, y en las redes sociales ambas publicaban fotos juntas con frecuencia. Pero todo habría cambiado a finales de 2019 cuando Stephanie descubrió que ambas estaban enamoradas del mismo chico, y lo que es peor, ambas estaban saliendo con él al mismo tiempo sin saberlo la una de la otra.


Cuando Stephanie se enteró de esto, no confrontó al chico, en realidad, sintió mucho celos y buscó la orientación de un practicante de su religión para aprender cómo hacer un hechizo para alejar a su amiga de este chico. Este hombre le aconsejó que tomara algunas prendas de ropa de NARYELI , cavara un agujero en el cementerio y colocara estas prendas en una tumba que estuviera en uso. También tendría que tomar polvo de los huesos de una persona y hacer que NARYELI lo ingiriera como una ofrenda.


La madre de NARYELI salió de viaje por trabajo durante el último fin de semana de 2019. Cuando regresó a casa el 30 de diciembre, notó que su hija llevaba una pulsera en la muñeca. De inmediato, arrancó la pulsera, la rompió y la tiró por la ventana a la calle. Pocas horas después de este incidente, cosas extrañas comenzaron a suceder. En la mañana del 31 de diciembre de 2019, NARYELI se desmayó. La familia no estaba tan preocupada porque conocía su historial medico , pero cuando NARYELI se despertó, estaba completamente diferente.


Se dice que NARYELI se volvió extremadamente agresiva, con una fuerza que no era común en ella. Su madre intentó contenerla y terminó con varias marcas en todo el cuerpo. Además, NARYELI se negó a comer, beber agua y dejar de hablar. La madre de NARYELI la llevó a dos hospitales en Vargas en los días siguientes, pensando que el desmayo podría haber causado algún daño en su cerebro, pero después de varios exámenes, ninguno mostró alguna alteración y la enviaron de vuelta a casa, ya que los médicos no encontraron ninguna razón para su extraño comportamiento y no tenían un diagnóstico ni un tratamiento.


Cuando la medicina no pudo ayudar, la madre llevó a NARYELI a algunos cultos, ya que comenzó a creer que su hija estaba poseída debido a la pulsera que le había dado su amiga Stephanie. Sin embargo, ni siquiera los cultos religiosos tuvieron efecto. Como último recurso, la madre acudió a un Centro Espiritista el 2 de enero de 2020. Llevó a NARYELI al Centro Espiritista "Cuyo nombre omitiremos", ubicado a orillas del río . En una sesión espiritista, se concluyó que la niña estaba poseída por un espíritu maligno como resultado de un trabajo que alguien había hecho en su contra. Como tratamiento, la someterían a rituales durante los próximos nueve días para liberarla del mal que habitaba en ella, según las fuentes.


Estos rituales consistían en baños nocturnos en las frías aguas del río San Roilan. El 11 de enero de 2020, NARYELI , con tan solo 16 años, habría desfallecido antes de someterse a este tipo de exorcismo. Su propia madre, que estaba presente, llamó a los paramédicos, pero no pudieron socorrerla a tiempo. En el lugar, los funcionarios de la Delegación Regional del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas recuperaron a la joven, quien fue enviada al Instituto de Medicina Legal (IML).


Al día siguiente, una autopsia realizada en la sede del Servicio Nacional de Medicina y Ciencias Forenses concluyó que la causa de lo ocurrido con NARYELI fue un paro cardíaco debido a una neumonía no tratada. Los exámenes también confirmaron que presentaba una marcada descompensación física como consecuencia de la desnutrición y la deshidratación. Según el relato de la madre, NARYELI había dejado de comer y beber desde el 31 de diciembre, y a veces la obligaban a tomar agua, pero le resultaba más difícil forzarla a comer.


Por otro lado, la madre sostenía que su hija estaba poseída y que lo ocurrido era resultado de un espíritu maligno. Dado que su familia no aceptó el diagnóstico de neumonía, ya que un día antes de lo sucedido, la madre había solicitado nuevos exámenes que no revelaron ningún problema de salud, NARYELI pasó por tres hospitales diferentes y al menos cuatro especialistas en urgencias, ninguno de los cuales encontró ningún problema que requiriera tratamiento inmediato.


Un informe policial concluyó que la joven había contraído neumonía y que los baños nocturnos en el río San Roilan habían empeorado aún más su sistema respiratorio. Como resultado, sus órganos colapsaron, lo que posteriormente causó el paro cardíaco.


Tras la muerte de Naryeli, Stephany fue acusada y denunciada, ante el cuerpo de investigación, ella alegó que si hizo una sesión donde entregó prendas de la víctima en un cementerio y la entregó a un muerto en cuerpo y alma para que éste la consumiera.


La policía no lo tomó como un homicidio directo y decidió dejar ir a Stephany.



La trágica muerte de NARYELI plantea un dilema entre dos posibles causas: brujería o mala praxis médica. Por un lado, la madre sostenía firmemente la creencia de que su hija estaba poseída y que los rituales realizados habían desencadenado un trágico desenlace. Por otro lado, los informes médicos concluyeron que la causa de la muerte fue una neumonía no tratada, agravada por la desnutrición y la deshidratación.


Es importante recordar que la medicina se basa en evidencia científica y en diagnósticos respaldados por exámenes y pruebas clínicas. En este caso, varios especialistas no encontraron indicios de problemas de salud graves que requirieran tratamiento urgente antes de la tragedia.


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